"Fue difícil y frustrante. Cuando él me golpeaba, no podía dejar que percibiera lo cuánto me había golpeado. Él es un chico talentoso y mejoró mucho, como yo pensé que mejoraría. Tengo que respetarlo. Él es un campeón", dijo a la web "Sherdog".
Rashad resistió a los cinco rounds, pero no consiguió hacer mucho contra Jones y llegó a balancearse con algunos codos aplicadas por el rival. Él dijo que tuvo dificultad en los intentos de derrumbarlo:
"Yo tenía un gran campo de entrenamiento, pero a veces usted no siente eso. Hubo momentos en la lucha en que yo sentí que podría haber hecho algo, pero no apreté el gatillo cuando necesitaba. Voy a tener que volver y ver lo que hice mal. Yo pensé que iría a buscarlo. Creí que él estaba sin el tiempo correcto, y eso nunca pasa, entonces sentí que él estaba nervioso. Él comenzó a hacer el juego de manos. Cuando él me tocó, yo sabía que él iría a buscarme con los codos. Quería aprovechar esos momentos para derrumbarlo, pero él me acertó todas a veces".
El clima tenso ya pasó, así como el esperado duelo. Aún así, Rashad Evans afirmó que aún pretende ser nuevamente campeón de la categoría y, por eso, prefiere dejar las cosas con Jon Jones exactamente como están. El retorno de la amistad fue descartado:
"Tarda un tiempo para absorber. Aún tengo que ir hacia mi casa y, probablemente, llorar un poco. Usted nunca sabe lo que puede pasar en el futuro. Nosotros éramos amigos antes, pero probablemente vamos a estar compitiendo el uno contra el otro de nuevo. Entonces vamos a tener que mantener en ese nivel".
